Llevar una dieta con comidas que te encanten más es un error muy fácil de cometer, porque al final acaba con la meta de tener un cuerpo fitness.
Si te identificás con este comentario entonces tenés que seguir leyendo, porque aquí te dejamos los errores más comunes que se cometen cuando se intenta perder peso. Probablemente sin darte cuenta los estás cometiendo.
Eliminar los carbohidratos
Existe la falsa creencia de que para perder esos kilillos de más hay que eliminar los carbohidratos de la dieta diaria. Esto es un error, porque al hacerlo se pueden provocar desórdenes alimenticios. Nuestro cuerpo necesita los carbohidratos, ellos son los encargados de proporcionarnos energía.
Lo ideal es ser un poco más prudentes con su consumo y asegurarnos de que estén comiendo los denominados carbohidratos buenos como las legumbres, verduras y cereales integrales, y evitar los procesados.
Saltarse las comidas
Es verdad que hay que reducir las calorías para empezar a ver resultados, pero saltarse las comidas no es la solución. Cuando te saltás las comidas tu cuerpo se sentirá cansado, se hace más lento el metabolismo y probablemente tendrás tanta hambre que cuando te sientes a comer lo harás en exceso.
Lo que sí está bien es realizar cinco comidas al día en pequeñas porciones. Te darás cuenta de que obtendrás mejores resultados.
Creer en dietas milagrosas
Esas dietas que te prometen bajar de peso a una velocidad increíble, simplemente debés dejarlas de lado. No son saludables y terminan por hacerle daño a tu organismo. Lo mismo ocurre con productos como pastillas o bebidas quema grasa que usando publicidad engañosa te quieren hacer creer que perderás 10 kilogramos en una semana.
El único secreto para estar en forma es incorporar a tu dieta diaria comidas saludables y tener una buena rutina de ejercicios.
Vivir con hambre
La palabra dieta no tiene que ser una sentencia de pasar días de hambre. Comer muy poco no es sinónimo de bajar de peso, lo único que conseguirás es estar de mal humor por tener horas con el estómago vacío y terminar por abandonar la dieta antes de empezar a ver los resultados.
El secreto está en comer alimentos que te proporcionen las vitaminas y nutrientes que tu cuerpo necesita para sentirse y estar bien. Por ejemplo, sustituir el uso de la mantequilla por margarina que está hecha de aceites vegetales por lo que contiene grasas insaturadas “buenas” que ayudan a reducir el colesterol.
La clave para no pasar hambre cuando estamos a dieta es darle prioridad a las comidas saciantes como la avena, manzanas y productos integrales.
El estrés es el enemigo
Por si no lo sabías una de las razones por la que nuestro cuerpo no elimina esos kilillos que tanto nos molestan es el estrés. Si te sumerges en los problemas del día a día y no duermes bien, tu organismo está en un estado permanente de alerta que le impide funcionar adecuadamente y eliminar los excesos.
¿Cómo saber qué te pasa esto? Pues, sentirás pesadez estomacal, el abdomen inflamado, dolores musculares y de cabeza. Así que mejor date un respiro y dejá que las cosas fluyan.
Si estás cometiendo, aunque sea uno de estos errores ya sabés por qué tu dieta de comidas saludables está destinada al fracaso. Pero no te preocupés, estás a tiempo de tomar los correctivos.
Para ayudarte en este proceso, no dejés de visitar nuestra sección de desayunos y comidas deliciosas. No te faltarán ideas.
